Uno de los aspectos más importantes en el cuidado y mantenimiento del césped natural es el riego. Sin embargo, hay otros muchos aspectos fundamentales a tener en cuenta para que crezca y se mantenga en perfectas condiciones durante todo el año.
Algunas de las dudas más frecuentes son la frecuencia con la que debe regarse el césped natural y cómo debe llevarse a cabo este riego. Por eso, en este post aclaramos todas tus dudas y abarcaremos los aspectos básicos para el correcto mantenimiento del césped natural.
Tabla de contenidos
Aspectos fundamentales para regar el césped natural
Realizar el riego correcto del césped dependerá de varios factores como el tipo de terreno, el lugar donde esté ubicado o la época del año. También es necesario que conozcas que existen distintas especies de césped, y unas necesitan más cantidad de agua que otras.
Por ejemplo, si el terreno es arenoso necesitará más cantidad de agua que si el terreno es compacto. Cuando el riego es más abundante de lo necesario puede provocar la aparición de enfermedades, como hongos. Por eso, es importante estudiar previamente las condiciones del terreno y el tipo de césped que tenemos.
¿Cuándo es el momento recomendado para regar el césped natural?
El momento perfecto para llevar a cabo el riego del césped natural será por la mañana temprano, al atardecer o por la noche. Realizar el riego durante las horas de sol, viento o temperaturas elevadas provocaría un desaprovechamiento del agua ya sea por evaporación o por desplazamiento en el aire.
Además de la hora del día, también es importante tener en cuenta la estación del año para efectuar el riego. En primavera será conveniente regar en días alternos, y en verano será aconsejable realizar el riego todos los días.
Sin embargo, en otoño e invierno esta frecuencia será muy diferente debido al cambio de temperaturas. En otoño deberá realizarse aproximadamente dos veces por semana, y en invierno una vez cada tres semanas.
La frecuencia puede variar considerablemente dependiendo del clima de la zona en la que nos encontremos.
Aspectos importantes a tener en cuenta antes de regar
Las dudas más frecuentes sobre el riego del césped son principalmente dos: la cantidad de agua que se debe aplicar y durante cuánto tiempo. Sin embargo, estos dos factores pueden variar considerablemente dependiendo de las características del terreno: humedad, capacidad de retención o capacidad de drenaje.
En rasgos generales, un césped convencional en verano necesitará aproximadamente 10 litros por m².
Por tanto, controlar el caudal y la presión de riego será fundamental teniendo en cuenta las características del terreno y sus necesidades. Tanto la presión como el caudal podremos controlarlo mediante el uso de un manómetro y de un contador.
Por eso, te damos una serie de consejos importantes a tener en cuenta. ¡Toma nota!
? La capacidad de absorción dependerá de las características físicas. Es importante analizar con anterioridad el grado de compactación, la textura y composición del suelo.
? Aplicar el agua de una forma homogénea sobre toda la superficie.
? No aplicar más cantidad de agua o a una velocidad superior a la que el terreno pueda absorber. Debe existir un equilibrio entre la velocidad y la cantidad de agua.
Sistema de riego recomendado para césped natural
Escoger el sistema de riego es otro de los elementos más importantes para conseguir que el césped se conserve en perfectas condiciones. Agilizar este proceso es posible mediante la instalación de un programador y un sistema de riego.
En Mundoriego recomendamos utilizar el sistema de riego por aspersión. Este es un sistema de riego distribuye el agua de forma homogénea simulando el agua de lluvia.
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Ventajas del césped natural
¿Sabías que el césped natural es capaz de liberar oxígeno suficiente como para 4 personas? Además de eso, tiene otras muchas ventajas que seguramente desconozcas y te vamos a detallar a continuación. ¡Toma nota!
? Proporciona frescor al ambiente, ya que ayuda a reducir la temperatura.
? Reduce la contaminación, absorbe el dióxido de carbono y mejora la calidad del aire.
? Cuando está cuidado adecuadamente es muy suave y agradable al tacto.
? Reduce la contaminación acústica al absorber el ruido.
? Aporta sensación de bienestar.
Otros aspectos importantes del césped natural
Siega
Con respecto a la siega, será necesario llevarla a cabo aproximadamente una vez a la semana. Para conseguir que este crezca sano, denso y fuerte es importante cortarlo cuando crezca más de unos 3 centímetros. En caso contrario, el césped se debilitaría y no alcanzaría la densidad adecuada.
Nuestro objetivo debe ser conseguir un césped lo suficientemente tupido para que no se vea la tierra que hay debajo.
¿Un consejo? Tras la siega, los restos de césped pueden ser utilizados a modo de compostaje y nos servirá como fertilizante.
Abono
Lo ideal será abonar el césped al menos tres veces al año. Normalmente deberá hacerse en primavera, verano y otoño.
¿Cómo saber si el césped necesita abono? Un claro síntoma de la falta de abono es cuando el césped empieza a tener un color amarillo.
¿Cuáles son los problemas más frecuentes en el césped natural? Si el césped está en la sombra, uno de los principales problemas que nos podemos encontrar es la aparición de musgo. Existe un tipo de abono antimusgo que evitará su aparición.
Una de las principales consecuencias de no hacer un abonado adecuado será la aparición de hierbas. Las gramíneas son un tipo de planta con tallo cilíndrico imprescindible para que el césped se conserve denso, sano y bonito.
¿Cómo debe realizarse el abonado? Uno de los aspectos más importantes en el abonado será realizarlo de manera homogénea por toda la superficie. Siempre teniendo en cuenta las recomendaciones del fabricante, ya que las instrucciones pueden variar dependiendo del tipo de abono.
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