El auge de la pitaya en Andalucía: Prevén quintuplicar su producción

Conocida como la "Fruta del Dragón", esta exótica delicia amplía su cultivo en Huelva, Sevilla, Córdoba y Málaga.

En el actual panorama agrícola de Andalucía, la pitaya aparece como una de las frutas favoritas para el cultivo. Esta exótica fruta, también llamada "fruta del dragón", no solo ha cautivado paladares, sino que también promete revolucionar el sector agrícola de la región. Con una cosecha de 80,000 kilos en la última temporada, los agricultores locales están entusiasmados con la posibilidad de aumentar la producción hasta cinco veces más durante los próximos años, recordemos que ya en 2022, muchos de los agricultores Andaluces ya apostaron por esta fruta (y no se equivocaron).

Actualmente, la pitaya se cultiva en unas veinte hectáreas distribuidas en las provincias de Huelva, Sevilla, Córdoba y Málaga. Esta fruta tropical se adapta sorprendentemente bien al clima andaluz, gracias a su necesidad de muchas horas de luz y su bajo requerimiento de agua. El sistema de riego es una de las claves más importantes para que esta fruta tenga un desarrollo adecuado. Como comentamos anteriormente, al contrario de otros árboles frutales, no necesita de una gran cantidad de agua, pero sí de un riego constante en donde la mejor opción es utilizar un sistema de riego por goteo, garantizando la correcta cantidad de agua a sus raíces.

A pesar de que los costos iniciales de plantación pueden ser elevados, los gastos de mantenimiento son relativamente bajos, lo que convierte a la pitaya en una opción rentable para los agricultores.

De dónde procede

Originaria de América Latina y Asia, la pitaya no solo destaca por su atractivo exterior, sino también por sus beneficios internos. Es rica en vitamina C y posee un alto valor antioxidante, lo que la hace un aliado en la prevención de enfermedades cardiovasculares.

El ciclo de producción de la pitaya se extiende de mayo a diciembre, lo que la convierte en un cultivo complementario ideal para los frutos rojos en provincias como Huelva. Con cada temporada, la calidad y el sabor de esta fruta continúan mejorando, asegurando que la pitaya tenga un lugar destacado en el futuro de la agricultura andaluza.